Y por otro lado está el aficionado común y corriente que también le duele que su equipo representativo a nivel nacional en el deporte que más le agrada haya sido derrotado y más como sucedió, con un gol producto de una "chapuza" de un jugador de Holanda al fingir una falta que derivo en el gol de la derrota. Aunque lo anterior es la excusa "perfecta" para evitar apreciar que el juego se descuido en los ultimos veinte minutos aproximadamente dandole demasiadas facilidades a Holanda.
Sin embargo con todo lo anterior y más México como país sigue con todo lo que implica y esta "distracción colectiva" se terminó sin que eso signifique más que un mundial más en el extranjero "sin el famoso quinto partido" y es todo.
Llevar esto más allá de ese significado es ocio.
Felicidades al equipo y su cuadro técnico por su muy buena actuación en general en esta copa del Mundial de Brasil 2014, hicieron más de lo esperado y sin que suene a conformismo es lo que se rescata, hay nuevas y muy buenas promesas en este deporte para destacar en futuros cotejos internacionales y solo el tiempo y parece que las circunstancias también marcarán cuando será el mejor tiempo de la selección mexicana de futbol.
Se cierra esta página y a continuar con la vida cotidiana sin México en el mundial y si con México en mente y alma para salir adelante de tanto pendiente social, económico, educativo y cultural que arrastramos y no solo el famoso "quinto partido".
Se cierra esta página y a continuar con la vida cotidiana sin México en el mundial y si con México en mente y alma para salir adelante de tanto pendiente social, económico, educativo y cultural que arrastramos y no solo el famoso "quinto partido".