1] cualquier cosa que nos haga olvidar nuestra verdadera identidad y nuestros sueños, y nos haga apenas trabajar para producir y reproducir.
2] tener reglas para una guerra (Convención de Ginebra).
3] emplear varios años estudiando en la universidad, y después no conseguir trabajo.
4] trabajar de nueve de la mañana a cinco de la tarde en algo que no da ninguna satisfacción, con la condición de poder jubilarse después de treinta años.
5] Jubilarse, descubrir que ya no se tiene energía para disfrutar de la vida, y morir pocos años después, de aburrimiento.
6] Usar botox.
7] Procurar tener éxito financiero, en lugar de buscar la felicidad.
8] Ridiculizar al que busca la felicidad en lugar del dinero, calificándolo de “persona sin ambición”.
9] Comprar objetos como coches, casas, ropas y definir la vida en función de estas comparaciones, en lugar de intentar averiguar la verdadera razón de estar vivo.
10] No hablar con extraños. Criticar al vecino.
11] Considerar que los padres siempre tienen la razón.
12] Casarse, tener hijos, y continuar juntos aunque el amor haya terminado, alegando que es por el bien de los niños (como si éstos no presenciaran las constantes peleas).
12ª] Criticar a todo aquel que intenta ser diferente.
14] Empezar el día con un despertador histérico al lado de la cama.
15] Creer que es verdadero absolutamente todo lo que está impreso.
16] Llevar un pedazo de tela de colores atado al cuello, sin ninguna utilidad conocida, pero que todos conocen con el pomposo nombre de “corbata”.
17] Nunca ser directo en las preguntas, aunque la otra persona entienda lo que se está queriendo saber.
18] Mantener la sonrisa en los labios cuando se tienen unas ganas locas de echarse a llorar. Y sentir piedad por todos los que demuestran sus sentimientos íntimos.
19] Pensar que el arte vale una fortuna, o que no vale absolutamente nada.
20] Despreciar por sistema lo que se consiguió fácilmente, porque, como no se dio el “sacrificio necesario”, no debe de tener las cualidades requeridas.
21] Seguir la moda, incluso cuando parece ridícula e incómoda.
22] Estar convencido de que todo famoso debe tener guardados montones de dinero.
23] Dedicar mucho esfuerzo a la belleza exterior, y preocuparse poco con la belleza interior.
24] Usar todos los medios posibles para mostrar que, aun siendo una persona normal, uno está infinitamente por encima del resto de los seres humanos.
25] A bordo de un transporte público, nunca mirar directamente a los ojos de la gente, pues tal cosa podría entenderse como un intento de seducción.
26] Al entrar al ascensor, mantenerse orientado hacia la puerta de salida, y comportarse como si no hubiera ningún otro ser humano allí dentro, por muy abarrotado que esté el lugar.
27] Jamás reírse a carcajadas en un restaurante, por muy buena que sea la historia.
28] En el hemisferio norte, elegir la ropa que se lleva de acuerdo a la estación del año: brazos desnudos en primavera (por mucho frío que haga) y jersey de lana en otoño (aunque haga mucho calor).
29] En el hemisferio sur, llenar el árbol de navidad de algodón, aunque el invierno no tenga nada que ver con el nacimiento de Cristo.
30] Cuando alguien llega a mayor, creerse dueño de toda la sabiduría del mundo, aunque muchas veces no se haya vivido lo suficiente para reconocer lo correcto.
31] Ir a una feria de beneficencia y pensar que con eso ya se ha hecho bastante para acabar con las desigualdades sociales del mundo.
32] Comer tres veces al día, aunque no se tenga hambre.
33] Creer que los otros siempre nos superan en todo: son más atractivos, más competentes, más ricos, más inteligentes, etc. Es muy arriesgado aventurarse más allá de las propias limitaciones: lo más conveniente es no hacer nada.
34] Hacer del coche un medio para sentirse poderoso, y capaz de dominar el mundo.
35] Soltar improperios en el tráfico.
36] Pensar que todo lo malo que hace el hijo de uno es por culpa de las malas compañías.
37] Casarse con la primera persona que dispone de cierto estatus social. El amor puede esperar.
38] Repetir continuamente “Yo al menos lo intenté”, aunque en realidad no se haya intentado absolutamente nada.
39] Postergar las experiencias más interesantes de la vida para cuando ya no quedan fuerzas para llevarlas a cabo.
40] Huir de la depresión con fuertes dosis diarias de televisión.
41] Pensar que todo lo conquistado se puede dar por seguro para siempre.
42] Creer que a las mujeres no les gusta el fútbol, y que a los hombres no les gusta la decoración.
43] Echarle al gobierno la culpa de todo.
44] Estar convencido de que ser una persona buena, decente, educada, conlleva que los demás la consideren débil, vulnerable y fácilmente manipulable.
45] Estar igualmente convencido de que la agresividad y la descortesía en el trato con los otros equivale a tener una personalidad poderosa.
46] Tener miedo de la fibroscopia (los hombres) y del parto (las mujeres).
47] Por último, creer que la religión de uno, además de la única dueña de la verdad absoluta, es la más importante, la mejor, y que todos los seres humanos de este inmenso planeta que crean en cualquier otra manifestación de Dios están condenados al fuego del infierno.
Tomado del blog de Paulo Coelho.
http://paulocoelhoblog.com/2009/12/21/inventario-de-la-normalidad/?ref=nf
El artículo no es mío, es tomado del blog de Paulo Coelho y prácticamente lleva jirivilla de ironía y por eso también comento que el punto 15 es muy interesante y dice: es considerado normal... 15. Creer que es verdadero absolutamente todo lo que está impreso. --> O sea que, si aceptáramos como normal muchas cosas en la vida ya no estaríamos aquí o estaríamos muy enfermos, deprimidos o maldiciendo a medio mundo y esa no es la idea. Ahora lee cada punto como anormal y cambia el asunto y la perspectiva en consecuencia. Saludos!!!
De hecho ya lo hiciste cuestionando cada punto!!! Es la magia de la literatura irónica como si fuera Psicología Inversa!!!